ESTUDIOS SOBRE KAFKA
Decía Kant: las percepciones sin
conceptos son ciegas. Yo estoy de acuerdo con esta afirmación. Por
ello, he de felicitarme, como hemos de felicitarnos los amantes de la cultura
y del pensamiento, de que la editorial Renacimiento acabe de lanzar al mercado
editorial este libro, de este erudito autor onubense, al cual tanto me hubiese
gustado conocer en vida.
Ernesto Feria Jaldón, autor extremadamente analítico, no cesa
hasta que nos descubre todas las causas que generaron el hecho, no cesa hasta
hacemos ver con claridad los efectos que producirá tal hecho, no cesa
hasta comparar el hecho con el desarrollo del mundo, del ser, del hombre,
del lector, y demostrar que todo ello forma parte de una unidad indisoluble.
La unidad indisoluble de la lucidez de su escritura y la inducida reflexión
en un lector que, sin darse cuenta, deposita sus emociones en la telaraña
de sus pensamientos
En este Estudios sobre Kafka, Ernesto Feria nos muestra una teoría
arriesgada y original, en cuanto trata de unir la producción literaria
del genial Franz Kafka a la realidad social desde el discurso del psicoanálisis
freudiano, basándose en la construcción del mito edípico
de Kafka frente al padre y de la imposibilidad del checo para el amor y las
relaciones sociales debida a una enfermedad mental buscada inconscientemente
y, por fin, hallada que lo sume en la neurosis y la depresión endógena.
Sin embargo, tal hecho no hace de Kafka un sujeto alejado de la realidad,
sino que sus sueños, pesadillas y demonios interiores son procesados
a través de la escritura para ser transformados, paradójicamente,
en análisis diáfano de la realidad.
Nos dice Ernesto: la terrible verdad del Ser: nuestra ausencia ontológica
de libertad. Por ello agudamente decía Lacan que el neurótico
tiene por causa la verdad. Tal fue, excavando incansablemente en sus simas
ruinosas, la causa de Franz Kafka Este ensayo nos muestra a un Kafka preocupado
por la esencia ontológica del ser, del hombre, moderno. Sin embargo,
a pesar de que Kafka murió, hace casi ochenta años, sus reflexiones
intersubjetivas son las mismas que atañen al hombre actual, porque
él fue un visionario que auguró desde su locura el desarrollo
tecnológico, el culto a la competitividad y a la prisa, y las sensaciones
de vacío existencial que hoy angustia un ser humano que, resignado
llama libertad (eufemismo) a tener derecho a elegir entre varias obligaciones,
todas absurdas.
"Y es que en esta actualidad inmisericorde el hombre está absolutamente
solo: ha tomado conciencia de su soledad ontolólógica en la
medida en que la ansiedad, la prisa, la competitividad y los falsos encantos
de los señuelos tecnológicos han producido una pulverización
mitográfica de la humanidad en individualidades cerradas, egoístas,
insolidarias, indiferentes o crasamente ignorantes del dolor ajeno" nos
dice Ernesto en la página 225. Este párrafo muestra las preocupaciones
del autor acerca de la obra de Kafka, del hecho literario, de la causa obsesiva
que lo genera, de la neurosis colectiva que lo produce, de la castración
simbólica ante un padre comparable a la moral social, y que todo ello
es el mundo que hemos construido aunque no podamos verlo así, ciegos,
como estamos, por nuestra ansiedad por deseos de irrealidad.
Estudios sobre Kafka
Ernesto feria Jaldón
Ed. Renacimiento
Sevilla, 2000MÁQUINA, EL HOMBRE MISMO
Fernando Domenech